sábado, 31 de agosto de 2013

Fragmento traducido de La princesa y la reina, de George R. R. Martin

Hace poco vio la luz un breve fragmento de La princesa y la reina, el nuevo relato de George R. R. Martin ambientado en el mundo de Canción de Hielo y Fuego que aparecerá en la antología 'Dangerous Woman' (como publiqué aquí). En el mismo, escrito desde el punto de vista de un maestre de la Ciudadela de Antigua, asistimos a los inicios de la mítica Danza de los Dragones, la guerra civil que enfrentó a los Targaryen por el Trono de Hierro. El texto estaba en inglés, pero en el foro de Asshai.com (posiblemente la mejor página en español dedicada a Martin y su obra) la forera maria_lyanna se tomó la molestia de traducirlo para compartirlo con todos los lectores de Canción de Hielo y Fuego y aquí os lo dejo, para aquellos que todavía no lo hayaís leido.

LA PRINCESA Y LA REINA, o LOS NEGROS Y LOS VERDES

La historia de las causas, orígenes, batallas y traiciones de la trágica masacre conocida como la Danza de los Dragones, relatada por el Archimaestre Gyldayn de la Ciudadela de Antigua.

La Danza de los Dragones es el altisonante nombre que se confiere a la salvaje lucha interna por el Trono de Hierro de Poniente que enfrentó a dos ramas rivales de la Casa Targaryen desde el año 129 al 131 Después de la Conquista (DC). Describir los oscuros, turbulentos y sangrientos eventos de este período como “danza” nos resulta grotescamente inapropiado; sin duda, la frase tiene su origen en algún bardo. “La Muerte de los Dragones” sería desde luego más adecuado, pero la tradición y el tiempo han grabado a fuego la denominación más poética en las páginas de la Historia, así que tendremos que seguirles la corriente al resto.
El rey Viserys I.
Había dos principales aspirantes al Trono de Hierro tras la muerte del Rey Viserys I Targaryen: su hija Rhaenyra, la única descendiente viva de su primer matrimonio; y Aegon, el mayor de los hijos que le dio su segunda esposa. En medio del caos y la carnicería causada por su enfrentamiento, otros aspirantes a reyes reivindicarían también sus derechos, pavoneándose como titiriteros en el escenario durante una quincena o una luna, sólo para caer tan rápidamente como se habían alzado.
La Danza dividió los Siete Reinos en dos, ya que los señores, caballeros y el pueblo llano se manifestaron a favor de uno u otro bando y tomaron las armas contra el contrario. Incluso la propia Casa Targaryen acabó dividida cuando los parientes, amigos y descendientes de cada aspirante se vieron implicados en la pelea. Durante los dos años de lucha, los grandes señores de Poniente sufrieron terribles pérdidas y daños, como también sus banderizos, caballeros y el pueblo llano. Pese a que la dinastía sobrevivió, al final del conflicto el poder de los Targaryen había disminuido mucho, y el número de dragones que quedaban en el mundo se había visto radicalmente reducido.
La Danza fue una guerra diferente de cualquier otra jamás librada en la larga Historia de los Siete Reinos. Aunque hubo marchas y cruentas batallas entre ejércitos, gran parte de la masacre tuvo lugar en el agua, y especialmente en el aire, ya que hubo enfrentamientos de dragón contra dragón, con diente, garra y llama. Fue también una guerra marcada por el sigilo, el asesinato y la traición, una guerra luchada en las sombras y los rincones de las escaleras, las cámaras del Consejo y los patios de los castillos con cuchillos, mentiras, y veneno.
El conflicto, que hacía tiempo que permanecía latente, estalló abiertamente al tercer día de la tercera luna de 129 DC, cuando el rey Viserys, que estaba enfermo y postrado en su cama, cerró sus ojos para echar una siesta y murió sin volverse a despertar. Su cuerpo fue descubierto por un sirviente a la hora del murciélago, cuando era costumbre del rey beber una copa de hidromiel. El sirviente corrió a informar a la reina Alicent, cuyos aposentos se encontraban un piso por debajo de los del rey.
Rhaenyra Targaryen.
El sirviente reveló la terrible noticia directamente a la reina y sólo a ella, sin levantar la alarma general: la muerte del rey llevaba tiempo esperándose, y la reina Alicent y sus partidarios, los llamados “verdes”*, se habían ocupado de dar instrucciones a los guardias y sirvientes de Viserys sobre lo que tenían que hacer cuando llegase el día.
(* En el año 111 DC, se celebró un gran torneo en Desembarco del Rey por el quinto aniversario de bodas del rey y la reina Alicent. En el banquete inaugural, la reina lució un vestido verde, mientras que la princesa iba llamativamente vestida en el rojo y negro de los Targaryen. Esto no pasó desapercibido, y desde ese momento se convirtió en costumbre referirse a los “verdes” y los “negros” al hablar del bando de la reina y el de la princesa, respectivamente. En el propio torneo, los negros salieron bastante mejor parados cuando Ser Criston Cole, que llevaba el favor de la princesa Rhaenyra, derrotó a todos los paladines de la reina, incluyendo a dos de sus primos y a su hermano pequeño, Ser Gwayne Higtower.)
La reina Alicent acudió enseguida a los aposentos del rey, acompañada por Ser Criston Cole, Lord Comandante de la Guardia Real. Una vez que hubieron confirmado que Viserys estaba muerto, Su Alteza ordenó que su habitación fuese sellada y que se apostasen guardias en su puerta. El sirviente que había encontrado el cadáver del rey fue hecho preso, para asegurarse de que no extendiese la noticia. Ser Criston regresó a la Torre de la Espada Blanca y envió a sus hermanos de la Guardia Real a buscar los miembros del Consejo Privado del rey. Era la hora del búho.
En aquel entonces, al igual que ahora, la Hermandad Juramentada de la Guardia Real estaba formada por siete caballeros, hombres de probada lealtad e indudable destreza que habían jurado solemnemente dedicar su vida a defender la persona y la familia del rey. Sólo cinco de los Capas Blancas se encontraban en Desembarco del Rey en el momento de la muerte de Viserys: el propio Ser Criston, Ser Arryk Cargyll, Ser Rickard Thorne, Ser Steffon Darklyn y Ser Willis Fell. Ser Erryk Cargyll (el gemelo de Ser Arryk) y Ser Lorent Marbrand, en Rocadragón con la princesa Rhaenyra, continuaban al margen de todo, sin saber nada, mientras sus hermanos se adentraban en la noche para sacar a los miembros del Consejo Privado de sus camas.
Reunidos en los aposentos de la reina, mientras el cuerpo de su marido se enfriaba sobre sus cabezas, estaban: la misma reina Alicent; su padre Ser Otto Hightower, Mano del Rey; Ser Criston Cole, Lord Comandante de la Guardia Real; el Gran Maestre Orwyle; Lord Lyman Beesbury, el octogenario Consejero de la Moneda; Ser Tyland Lannister, Consejero de Barcos y hermano del Señor de Roca Casterly; Larys Strong, apodado Larys el Patizambo, Señor de Harrenhal y Consejero de los Rumores; y Lord Jasper Wylde, apodado Barra de Hierro, Consejero de Leyes.
El Gran Maestre Orwyle comenzó la reunión repasando los acostumbrados procedimientos y trámites necesarios a la muerte de un rey. Dijo: “El Septón Eustace debe ser convocado para que lleve a cabo los últimos ritos y rece por el alma del rey. Un cuervo debe ser enviado a Rocadragón enseguida para informar a la princesa Rhaenyra del fallecimiento de su padre. ¿Tal vez Su Alteza la reina querría escribir el mensaje, para suavizar estas tristes noticias con algunas palabras de condolencia? Las campanas siempre suenan para anunciar la muerte de un rey, alguien debería encargarse de ello; y, por supuesto, tenemos que comenzar los preparativos para la coronación de la reina Rhaenyra…”
Ser Otto Hightower lo interrumpió. “Todo esto debe esperar”, declaró, “hasta que el asunto de la sucesión se aclare”. Como Mano del Rey, estaba autorizado a hablar con la voz del rey, e incluso a sentarse en el Trono de Hierro en ausencia del rey. Viserys le había otorgado la autoridad de gobernar los Siete Reinos, y “hasta el momento en el que nuestro nuevo rey sea coronado”, ese gobierno continuaría.
“Hasta que nuestra nueva reina sea coronada” dijo Lord Beesbury, con tono mordaz.
“Rey”, insistió la reina Alicent. “El Trono de Hierro por derecho debe pasar al hijo varón legítimo de mayor edad de Su Alteza”.
La discusión que siguió duró casi hasta el amanecer. Lord Beesbury habló en favor de la princesa Rhaennyra. El anciano Consejero de la Moneda, que había servido al rey Viserys durante todo su reinado, y a su padre Jaehaerys el Viejo Rey previamente, recordó al Consejo que Rhaenyra era mayor que sus hermanos y tenía más sangre Targaryen, que el difunto rey la había escogido como su sucesora, que se había negado repetidamente a alterar el orden de sucesión pese a las súplicas de la reina Alicent y sus verdes, que cientos de señores y caballeros habían prometido obediencia a la princesa en el año 105 DC, y jurado solemnemente defender sus derechos.
Pero estas palabras cayeron en oídos de piedra.

viernes, 30 de agosto de 2013

Cómic de La Primera Ley

La Primera Ley, la entretenida trilogía del escritor inglés Joe Abercrombie, tiene una adaptación al cómic que ha contado con el visto bueno del propio autor y que es más que recomendable para todos aquellos que se hayan leido la primera parte de la saga. Chuck Dixon es el encargado de guionizar la historia de La voz de las espadas en cómic, mientras que la parte artística recaerá por un lado en Andie Tong –responsable de la adaptación de La Rueda del Tiempo al mundo de las viñetas– con el color a manos de Pete Pantazis. Lo bueno de esta adaptación es que se puede leer de manera totalmente gratuita en la página oficial del cómic, aquí. Eso sí, está en inglés pero merece la pena echarle un vistazo a las aventuras gráficas del salvaje Logen Nuevededos, el inquisidor Glokta o el disoluto Jezal dan Luthar. ¡Disfrutadlo!

jueves, 29 de agosto de 2013

Reseña: Antes de que los cuelguen, de Joe Abercrombie



SINOPSIS: El Superior Glokta tiene la misión de defender una ciudad sitiada por el ejército gurko y minada por la traición, además de descubrir que ocurrió con su predecesor desaparecido…
Los hombres del Norte han cruzado la frontera y han entrado a sangre y fuego en territorio de la Unión. Para detenerlos no bastará con el ejército del Rey…
Bayaz, el Primero de los Magos, conduce a un heterogéneo grupo de aventureros en una peligrosa misión por las ruinas del pasado…

RESEÑA: “Debemos perdonar a nuestros enemigos, pero nunca antes de que los cuelguen”. Con la cita que abre su libro, segunda parte de la trilogía La Primera Ley, Joe Abercrombie vuelve para demostrarnos que no le van las medias tintas. De nuevo nos sumergimos en su mundo particular, un lugar brutal, sangriento y donde la piedad brilla por su ausencia; quizá, en el fondo, demasiado cercano al nuestro propio. Tanto que podríamos pensar que Glokta o Logen Nuevededos podrían salir en nuestros televisores en cualquier momento… y no precisamente en la sección de sociedad. Seguro que si en otra mucho más sangrienta.
Sin embargo, tengo que reconocer que esta continuación baja el nivel respecto a La voz de las espadas, que abría la trilogía por la puerta grande, con momentos memorables del salvaje Logen o del cínico  inquisidor Glokta. En Antes de que los cuelguen ambos pasan bastante más desapercibidos, algo que se le puede perdonar a Logen ya que sus puntos de vista disminuyen en número en este libro, pero no al inquisidor tullido que carga con gran parte de la trama durante el asedio y la defensa de la ciudad de Dagoska, en tierras del peligroso Imperio de Gurkhul.
Ambos aparecen bastante descafeinados, aunque aun así logran destacar por encima de la media del resto de personajes. No obstante, otros que en la primera parte parecían más aburridos alcanzan mayor protagonismo e interés para el lector. Sobre todo destacaría los personajes de Ferro (quizá el que más evoluciona en esta segunda parte y el que más hace sonreír con su mal humor constante y sus frases cortantes como cuchillos) y el grupo de salvajes que intenta sobrevivir en el Norte a las órdenes de Tresárboles y Sabueso.
Estos últimos probablemente tienen las aventuras más interesantes de toda la novela, continuando con su odisea para escapar del odiado rey de los hombres del Norte, Bethod, y finalmente pasándose al bando de la Unión para combatirlo. El contraste entre los salvajes Sabueso, Dow el negro, Tul Duru y Hosco con los atildados nobles que rodean al príncipe Ladisla da lugar a uno de los momentos más cómicos de la historia. Durante la huida de los salvajes, el comandante West nos sirve como un excelente punto de referencia, con el que es fácil identificarse. Quizá por eso mismo funciona tan bien el momento en que el ‘civilizado’ West finalmente explota (y se gana el apelativo de ‘Furioso’), y que hace que el lector hasta sienta ganas de aplaudir su actuación frente al quejica y blando Ladisla (para mí uno de los momentos más inesperados, pero no por ello de lo más deseados. Hacía mucho tiempo que no veía caer a un príncipe en una novela de fantasía de una forma tan sencilla).
La mayor decepción de este segundo libro, sin ninguna duda, es el largo viaje al confín del mundo de Bayaz y su grupo de “elegidos”. Parece como si Abercrombie no tuviera muy claro que hacer con estos personajes y simplemente los puso a caminar (el recurso más antiguo de la literatura fantástica, tampoco lo criticaré por ello). Hay un par de escenas del viaje bastante entretenidas (el ataque en la colina de las antiguas piedras, con Logen y Ferro haciendo lo que mejor saben hacer: acabar con sus enemigos; o el viaje subterráneo por las ruinas de la ciudad de Aulcus, una especie de revisión del capítulo de las minas de Moria en La Comunidad del Anillo a través del particular prisma de Abercrombie). Pero si estas escenas logran sostenerse es sencillamente porque el autor maneja con absoluta maestría todos los momentos en que hay que desenvainar las espadas y pasar a la acción. Sus descripciones de batallas y combates son siempre magistrales.
El terrible inquisidor Glokta.
Sin embargo esto no hace más que agravar el hecho de que al final el viaje no conlleve a nada. Si, después de página y páginas de avanzar a través de tierras llenas de peligros resulta que la Semilla no está allí donde Bayaz esperaba encontrarla y el viaje no ha sido más que una gran pérdida de tiempo. Habrá que ver como soluciona Abercrombie semejante desaguisado, que me parece una auténtica tomadura de pelo al lector. De hecho, resulta muy fácil comprender el enfado de Ferro, Logen o Luthar, ya que es el mismo del lector: ¡Todo esto para nada!
Glokta, por otra parte, nos sigue regalando algunos momentos grandiosos durante la defensa de Dagoska paro muy por debajo de lo que vimos en La voz de las espadas. Con el cambio de ambiente el inquisidor no gana, a pesar de que sigue siendo el más listo de la clase y demuestre de nuevo que ser un tullido destruido no es una desventaja para él, si no lo que le hace más fuerte y peligroso.
En definitiva, Abercrombie baja el ritmo de la pedalada en esta segunda parte, pero aun así las más de 700 páginas de libro se pasan con gran rapidez, aunque solo sea porque los diálogos siguen estando sembrados de un humor negro que es casi imposible de resistir. Solo espero que en la tercera parte Abercrombie recupere el nivel, porque estamos sin duda ante uno de los autores que mejores momentos nos puede regalar a los lectores de literatura fantástica del siglo XXI.

lunes, 19 de agosto de 2013

Reseña: Choque de Reyes, de George R. R. Martin



SINOPSIS: Un cometa del color de la sangre hiende el cielo, cargado de malos augurios. Y hay razones sobradas para pensar así: los Siete Reinos se ven sacudidos por las luchas intestinas entre los nobles por la sucesión al Trono de Hierro. En la otra orilla del mar Angosto, la princesa Daenerys Targaryen conduce a su pueblo de jinetes salvajes a través del desierto. Y en los páramos helados del norte, más allá del Muro, un ejército implacable avanza hacia un territorio asolado por el caos y las guerras fratricidas.
George R.R. Martin, con pulso firme y enérgico, nos deleita con un brillante despliegue de personajes, engranando una trama rica, densa y sorprendente. Nos vuelve testigos de luchas fratricidas, intrigas y traiciones palaciegas en una tierra maldita por la guerra, donde fuerzas ocultas se alzan de nuevo y acechan para reinar en las noches del largo invierno que se avecina.

RESEÑA: Choque de Reyes, publicada en inglés en 1998, es el ejemplo perfecto de como la segunda parte de una saga literaria puede servir para profundizar y añadir grandeza a un mundo totalmente imaginario. Todos aquellos conflictos y luchas de poder que nos hipnotizaron en el primer libro adquieren en este segundo tomo unas proporciones épicas, como no podría ser de otra manera ya que en este segundo tomo de la saga nos sumergimos de pleno en la Guerra de los Cinco Reyes.
Los Siete Reinos están más divididos que nunca y todas las facciones luchan por el poder. La guerra se extiende como un incendio, pero a diferencia de las mayorías sagas fantásticas George Martin nos muestra su cara más dura y cruel (y más real): saqueos de pequeños poblados, asesinatos de niños, mujeres e inocentes de toda edad, violaciones, mutilaciones y huidas sin esperanza. De nuevo vemos que los principales  perjudicados por la guerra y el juego de tronos de los poderosos son los que menos tienen.
El viaje de Arya a través de las tierras arrasadas por la guerra es de lo mejor de este segundo tomo, y Martin no escatima a la hora de mostrar los detalles más escabrosos de cualquier contienda. El viaje (un tópico en todas las novelas de fantasía desde Tolkien) adquiere aquí un nuevo significado, muy alejado del simple periplo a través de tierras maravillosas. En Choque de Reyes el viaje significa enfrentarse a la muerte en cada momento, siempre a través de un mundo sin reglas válidas, incendiado por una guerra despiadada.
Sin embargo los verdaderos protagonistas de la novela son los diferentes reyes que luchan encarnizadamente por defender sus propios intereses (más o menos justos, según el punto de vista de cada cual). En Choque de Reyes tenemos para coronas para elegir: Robb Stark luchando por vengar a su padre y recuperar a sus hermanas, Joffrey Baratheon intentando imponer su dominio sobre todo Poniente, el rey conquistador Balon Greyjoy, el alegre Renly que considera que por ser guapo y joven merece la corona o el seco y estricto Stannis que solo quiere aquello es suyo “por derecho”.

Podríamos establecer una lista de reyes según su mayor o menor nobleza, pero ninguno saldría totalmente bien parado (incluso el Rey en el Norte, quizá el más justo y noble de todos ellos, arrasa las tierras de los Lannister causando miles de víctimas inocentes). Un mensaje muy claro de que en ninguna guerra hay buenos y malos claramente diferenciados.
La lista de personajes principales y secundarios sigue agrandándose en Choque a un ritmo alarmante, pero aun así Martin es capaz de presentarlos al lector con claridad y perfectamente definidos. Muchos de ellos resultan sencillamente hipnotizadores para el lector: el valiente Qorin Mediamano, la extraña Brienn de Tarth, el peligroso Jaqen H'ghar, el humilde Davos, el estricto Stannis (contrapartida exacta de su alegre hermano Renly) o la enigmática Melisandre de Asshai.
Esta última ayuda a introducir un tema que empieza a desarrollarse con más fuerza: el retorno de la magia. Si en el primer tomo teníamos la vuelta de los Otros y el renacimiento de los dragones, en Choque de Reyes la magia aparece como un elemento realmente oscuro y peligroso. El poder de Melisandre para ver el futuro en las llamas o engendrar sombras asesinas, o las siniestras visiones que tiene Daenerys en la Casa de los Eternos de Qarth son buena muestra de ello. Visiones, por cierto, magistralmente tratadas por Martin y que demuestran lo pensada que tiene el desarrollo de la saga, ya que mucho de lo que se le aparece a Daenerys lo veremos por nuestros propios ojos en las siguientes novelas.
Martin maneja a la perfección los distintos hilos de la enrevesada trama hasta llevarlos a la parte final de la novela donde asistimos a la terrible Batalla del Aguasnegras. El escritor nos regala algo no muy habitual en el  género, ya que al menos yo no recuerdo ningún otro libro de fantasía donde se describa con tanta exactitud y realismo una batalla naval. El catálogo de naves en combate, los abordajes y sobre todo el infierno que desata el fuego valyrio que el siempre ingenioso Tyrion desata sobre Desembarco del Rey son un abrumador colofón para esta segunda parte.
A pesar del gran número de páginas el libro nunca se hace pesado, por mucho que Martin se empeñe en dejarnos amplias descripciones de los manjares que se degustan en Poniente,  y los giros inesperados en todas las tramas nos obligan a pasar página tras página a un ritmo enloquecedor. No puedo terminar la reseña sin señalar que Tyrion, Jon Nieve y Daenerys siguen siendo los personajes más complejos psicológicamente de la saga, y los que más cercanos siente el lector, quizá porque los tres se siente terriblemente perdidos en la caótica situación en la que se encuentran pero aun así siguen adelante, luchando por lo que consideran mejor.

viernes, 16 de agosto de 2013

Impresionante trailer de The Witcher 3: Wild Hunt

La saga de siete libros protagonizada por Geralt de Rivia, un brujo cazador de monstruos, dio fama mundial a su creador Andrzej Sapkowski y revitalizó la literatura fantástica, acercandola al realismo sucio y sangriento que tanto abunda ahora en el género. Por ello no resulta raro que en el país de origen de Sapkowski, Polonia, decidieran utilizar el argumento de los libros para crear un videojuego. En 2007 salió a la venta en Europa y fue todo un éxito gracias a unos gráficos excelentes y mucha fidelidad a las historias de Sapkowski. En 2011 el videojuego tuvo una continuación, titulada Asesino de Reyes, que personalmente considero mucho mejor que la primera parte y que nuevamente se convirtió en un éxito de ventas y críticas. Por eso no es de extrañar que la compañía decidiera cerrar el círculo con una tercera parte que verá la luz en 2014 y de la que ya podemos disfrutar de un primer y muy espectacular trailer donde vemos a Geralt de Rivia hacer lo que mejor sabe: cazar monstruos.

jueves, 8 de agosto de 2013

Entrevista a Joe Abercrombie

La semana pasada tuvo lugar en Avilés (Asturias) el festival Celsius 232 dedicado a la ciencia ficción y la fantasia. Por el lugar desfilaron grandes autores nacionales e internacionales del género, entre los que se encontraron Steven Erikson, Joe Abercrombie, Javier Negrete o Juan de Dios Garduño. Pues bien, buscando información sobre la charla que impartió Joe Abercrombie he encontrado esta entrevista que le realizaron al autor inglés en septiembre de 2012 en la página LeeRunas.com, cuando se encontraba en España presentando su libro 'Los Héroes'. La transcribo aquí porque me ha parecido muy intersente, ya que Abercrombie habla sobre su inspiración, su forma de trabajar, sus personajes o la literatura fantástica en general. ¡Disfrutadla!

A la hora de imaginarte los escenarios de tus novelas, ¿Te inspiras en localizaciones conocidas?
Como escritor, creo que te sientes inspirado por todo lo que lees, ves, observas, experimentas y, particularmente, todo aquello con lo que disfrutas y aprecias, o incluso con aquello que no te llama demasiado la atención. Todo termina en ese caldo enorme que hay en tu cabeza desde donde finalmente surgen las palabras. Los lugares, escenarios y localizaciones que para mi significan algo, o donde he encontrado una belleza digna de admiración, no hay duda de que han encontrado un hueco en mi trabajo de una forma u otra. Tratas de recrear el sentimiento de grandiosidad que percibes en San Pedro, o la sensación de estar en la cima de una montaña en el Distrito de los Lagos. Pruebas todo aquello que pueda dar riqueza y veracidad a tus escritos.


¿A quién citarías como referente en la literatura fantástica?
Obviamente, Tolkien encabeza el género como un coloso y fue ciertamente mi primera gran influencia. Pero ha sido tan influyente en cualquiera que haya venido después que en realidad es difícil evitarlo. Luego están todos aquellos escritores como Moorcock o LeGuin que han tenido visiones muy diferentes de la suya y que tuvieron un gran impacto en mi cuando era niño. Supongo que es George R. R. Martin el que recientemente me ha llamado la atención. Leí su Juego de Tronos en una época en que dejé de leer fantasía, y aunque he visto todo lo que puede dar de sí el género y terminé un poco insatisfecho con las formas, demostró que puedes ser oscuro, realista, impredecible, dejarte con los nervios de punta y aún así seguir teniendo todas las virtudes de la creación fantástica. He visto claramente expresadas en su obra muchas de mis carencias. Intenté escribir fantasía por mi cuenta antes de leer Juego de Tronos, pero cambió totalmente mi visión de lo que podría llegar a hacerse con la forma.

¿Te inspiras en batallas y episodios históricos a la hora de escribir?
Sí, absolutamente. De hecho, debo decir que la historia es a menudo mi fuente de ideas. Muchas de las cosas que leo son históricas, siendo la mayoría historia militar de un tipo u otro. Los Héroes nació de un deseo de contrastar la impoluta y simplista visión heroica de la guerra que habitualmente obtenemos de la fantasía épica con la mayoritariamente más compleja, lóbrega y olvidada impresión que tenemos al leer historia.


¿Ves el boom de la novela fantástica que se está viviendo actualmente como una moda pasajera?
Espero verdaderamente que así sea, tanto desde el punto de vista del lector y espectador entusiasta como por el bien de mis cuentas bancarias, naturalmente. En realidad, siempre hay modas pasajeras y normalmente estas suelen giran en torno a un éxito en concreto. Por eso, desde que aparecieron las películas de El Señor de los Anillos se puede sentir que hay un interés creciente por la fantasía. Creo que Juego de Tronos ha proporcionado a la gente una alternativa, una visión más "adulta" de lo que puede dar de sí la fantasía. No hay duda de que la aparición de las películas de El Hobbit durante los próximos años dará un nuevo empuje a las cosas. Por el momento las cosas pintan bien. La literatura fantástica es un oficio muy amplio, aunque por supuesto un tipo de novela en concreto puede estar en boga mientras que otros pasan de moda. La crudeza y el realismo son ahora mismo el estilo actual. Esto se debe a que probablemente el romanticismo y la lírica están renaciendo...

Como escritor de literatura fantástica, ¿Se ve escribiendo novelas de otro género?
Supongo que una de las grandes cosas de la fantasía es que puedes escribir cualquier tipo de libro, hasta cierto punto. Puedes escribir una historia de crímenes o una novela de amor en un entorno fantástico tan fácilmente como puedes escribir el tipo de épica que solemos asociar con el género. Hay un montón de flexibilidad y, en cierto sentido, con mis tres libros independientes he intentado fusionar diferentes tipos de historias dentro del mundo de fantasía que he creado. La Mejor Venganza es un thriller de fantasía, Los Héroes una historia bélica de fantasía y Red Country un western de fantasía. Me gusta tratar de hacer algo nuevo en cada libro, aunque sea un poco. Por lo demás, creo que es fácil acabar pisando el mismo terreno en cada giro que trate de alejarse del género.


Como lector… ¿libro en papel o libro electrónico?
Como lector debo confesar que nunca he leído hasta final un solo e-book, sigo con el hábito del papel. Hay algo inevitable, creo, pero aprecio la comodidad así como el potencial de hacer muchas otras cosas interesantes que con el papel no puedes. Así que como escritor, posiblemente no debas ignorar la importancia de ese mercado emergente. Es el futuro.

¿Tienes algún sitio preferido para escribir? ¿Algún hábito concreto que te prepare para la jornada típica de escritor?
Tengo una habitación donde trabajo, pero debo admitir que las interrupciones son constantes con tres niños de menos de seis años. Cuanto más éxito obtienes como escritor, más trabajo tienes que hacer en tareas paralelas al oficio de escribir, tales como responder emails, hablar con agentes y editores, pensar en las ilustraciones y muchas otras cosas más. Es difícil encontrar una rutina.

¿Qué podrías decirnos sobre la trilogía "La Primera Ley" o cualquiera otra de tus novelas en caso de que tú mismo te conviertas en lector de tu obra, por ejemplo Los Héroes o La Mejor Venganza?
"La Primera Ley" fue mi primera toma de contacto con la trilogía tradicional de fantasía épica. Por eso quise incluir en el lote toda la acción, aventura, magia y misterio que la gente espera, pero con un enfoque bastante ceñido hacia los personajes en lugar de al entorno, un mundo moralmente ambiguo donde lo que está bien y lo que está mal no es tan fácil de diferenciar. Un acercamiento duro y visceral hacia la acción con algunos giros impredecibles en el argumento, con sentido del humor. La Mejor Venganza y Los Héroes han sido intentos de aplicar el mismo tipo de acercamiento hacia un tipo más concreto de historia, un thriller de venganzas en el caso de La Mejor Venganza y, en el caso de Los Héroes, una historia bélica que se centra en una única batalla de tres días.

Por último, y gracias por esta entrevista, nos gustaría, primero animarte a seguir escribiendo, pues tus obras son realmente adictivas e interesantes para el lector de fantasía épica habitual. Segundo, ¿cuáles son tus planes a largo plazo respecto a tu obra? ¿Seguirás escribiendo fantasía hasta el final de tus días, o habrá un cambio de género radical?
Creo que es muy importante mantenerse fresco. Uno escribe mejor cuando se siente motivado en lo que hace, por lo que no me gustaría terminar cavando la misma zanja indefinidamente. Seguramente continuaré probando con diferentes estilos para seguir conservando el interés. Pero eso no significa necesariamente abandonar la fantasía. Habrá seguramente por lo menos tres libros más ambientados en el mundo de "La Primera Ley". Habrá que ver hacia donde sopla el viento...

Fuente: Lee Runas